Eine halbkreisförmge Gravur der Felsbildstation El Lomo de La Fajana, El Paso, La Palma.

El grabado del Hoyo-Peña del Diablo

Una joya paisajística única con restos antiguos y más recientes de asentamientos

La maravillosa cuenca del Hoyo-Peña del Diablo se encuentra en el lado norte del Valle de Aridane en El Paso. La depresión está rodeada por paredes y se presenta una amplia visión hasta los conos volcánicos pequeños al sur de Los Llanos. Aproximadamente en el centro del valle desemboca una barranquera que se ha formado en épocas de lluvias por las aguas torrenciales. A su vez, en el terreno plano está conectada con un cauce de barranco estrecho que fue rellenado con piedras sueltas del entorno, formándose al mismo tiempo un camino central. Bajo este relleno de piedras, el agua de la lluvia estacional se filtra y eventualmente antes era canalizada a una superficie de terreno vecina que es solo ligeramente inclinada.

Hoyo-Peña del Diablo
Ilust. 1: El dibujo del petroglifo coloreado de rojo presenta claras semejanzas con las otras dos ilustraciones. Sólo por esta razón podría tratarse del mismo elemento paisajístico..

Las líneas paralelas semicirculares del petroglifo asociable al Hoyo-Peña del Diablo y los bancales realmente existentes en este lugar casi sugieren que los cultivos en bancales ya existían en tiempos de los indígenas.

Hoyo-Peña del Diablo – Un poblado de cuevas de los indígenas

En el margen superior de la hondonada se abren cuevas y abrigos, delante de los que en parte fueron erigidos paredones de piedra como protección que se apoyan contra la pared del risco. Algunos de estos muros de piedras sueltas muestran técnicas artesanales muy diferentes y en parte sofisticadas, lo que apunta a tiempos de construcción más tardíos. En este contexto también debe mencionarse el modo de construcción más sencillo de los restos de paredes de una cabaña próxima a la Peña del Diablo que podrían ser más antiguos. Algo parecido sucede con los muros de contención de piedra seca, también construidos de distintas formas, aunque aquí también las huellas de erosión de las piedras, el crecimiento de liquen, etc. revelan algo acerca de la sucesión temporal.

«Se puede decir que toda la base de los riscos que delimitan por el lado norte y este la depresión del Hoyo-Peña del Diablo constituyó en época prehispánica, un gigantesco yacimiento de habitación sin discontinuidad hasta que el risco es cortado por una barranquera que desciende desde las laderas de Tiramasil y la Fuente del Pinillo» (Pais Pais, 19941Felipe Jorge Pais Pais. Estudio Detallado de Impacto Ecológico de las Normas Subsidiarias de El Paso. La Palma. Sauquillo, Lucía et. al. Aspectos arqueológicos de Dr. Jorge Pais Pais. INMACAN- Investigación Medio Ambientales Canarias S.L. Juni 1994. Págs. 48- 49.).

Para tener una idea de toda la hondonada siguen fotografías de 2009. La vista general se obtuvo desde el bancal más alto que se esconde en la primera foto detrás del pino.

Ilust. 2: Una vista magnífica desde el margen superior de la depresión.

Una enorme Peña del Diablo

Naturalmente, lo que convierte a esta caldera en un escenario espectacular es la aislada Peña del Diablo de aproximadamente 45 metros de alto, en el margen inferior de la hondonada. Cuando nos acercamos al valle, este monolito parece esférico y majestuoso. Con un mito que atemoriza, podría haber protegido a los habitantes del valle de visitantes hostiles. Sin embargo, cuando se ve de cerca, su aspecto colosal en el terreno llano -aparte de su tamaño- resulta engañoso. En realidad, es muy frágil y podría ser destruido muy fácilmente. Esto se debe a que este gigante está formado por un conglomerado de fragmentos de roca parcialmente sueltos y atravesado por profundas grietas.

¿Cómo y por qué llegó este gran trozo de roca, torneado pero frágil, a este fértil valle? Esta pregunta no sólo era inexplicable para los indígenas de La Palma. Por lo tanto, parece que hubo manejos secretos, porque ningún buen Dios dejaría caer a tal monstruosidad en medio de este magnífico espacio de asentamiento, rompiéndola casi en el proceso. En cambio, una obra del diablo sería algo mucho más lógico e intimidatorio. En consecuencia, no es de extrañar que esta piedra recibiera el nombre de Peña del Diablo.

Ilust. 3: Subiendo el barranco, se abre en un lugar apartado y más alto un valle con tierra fértil. Al mismo tiempo surge en el margen oriental una misteriosa bola de piedra en apariencia gigantesca, la Peña del Diablo, que aumenta con cada paso de tamaño y parece más amenazante.

Un símbolo circular para representar el monolito en apariencia esférico

Sin embargo, en una inspección del bloque más de cerca, resulta que es muy estrecho en la cara lateral, lo que muestra el mapa en el collage, véase ilustración 1. Pero podría ser que, sobre todo por las abundantes lluvias o los terremotos, así como por las raíces de las plantas que crecen en la roca, se han desprendido una y otra vez piezas del peñasco. ¿Se utilizaron las piedras caídas al suelo y eventualmente también otras, que pueden ser desprendidas muy fácilmente de la estructura gigantesca, para la construcción de los muros? ¿Podría haber tenido, quizá hace mucho tiempo, La Peña del Diablo una planta más circular en lugar de la ovalada?

A estas consideraciones hay que añadir que la impresionante Peña del Diablo también es visible desde la distancia. Especialmente desde el muy frecuentado y antiguo camino de conexión entre los lados oeste y este de la isla, desde el pueblo de Hermosilla, la peña parece casi esférica.

Como hemos visto en las interpretaciones anteriores de los dos petroglifos soliformes, los grabados rupestres que presumiblemente simbolizan montañas, están formados, entre otras cosas, por un círculo central y otro exterior.

Por lo tanto, resulta obvio que el monolito erguido que generalmente se percibe como esférico, también esté representado en el panel de ideogramas geométricospor un círculo doble.

Ilust. 4: La Foto es de Wikipedia. Palabra clave: Peña del Diablo

Esto también se ve apoyado por el hecho de que la posición del peñasco en la hondonada del valle, el símbolo, se puede ver en el lugar correspondiente en el grabado rupestre, si es que mi interpretación es correcta (véase la ilustración 4).

Otro círculo podría simbolizar un tagoror

Directamente a la izquierda de ese signo previamente interpretado hay un simple círculo grabado en el mismo petroglifo. Este podría representar un lugar de reunión circular de los indígenas, un llamado tagoror. Pues en esta ‘fosa del diablo’, justo enfrente, al otro lado del camino central, existe la única zona más grande y casi plana del valle. Desgraciadamente, hace unos años se erosionó parte del terreno en la zona del pino, por lo que cuando se viene del barranco, se ve el suelo desnudo.

¿Cómo era este lugar antes del deslizamiento? ¿Es posible que en el pasado hubiera piedras dispuestas en círculo en la zona? Y si, como suele ser el caso, se utilizaron piedras algo más grandes para el cerramiento del lugar de reunión, ¿aún se pueden encontrar huellas en el suelo? No obstante, como la zona se utilizó intensivamente para el cultivo durante un tiempo después de la conquista y posteriormente como campos de pastoreo para las cabras, muchas estructuras han cambiado o han desaparecido.

Ilust. 5: Desde el Barranco de Torres miramos a la poderosa Peña del Diablo. Pero las siguientes fotos de esta serie transmiten su fragilidad en un entorno cambiado.

Un microclima favorable / Un lugar de asentamiento óptimo: El Hoyo-Peña del Diablo

Al igual que la ladera norte de la Montaña de la Hiedra este valle también tiene un microclima favorable. Porque, por un lado, las paredes rocosas abiertas al sur ofrecen una buena protección del viento y guardan el calor. Y, por otro lado, si llueve más extensamente y durante más tiempo más arriba, en el Pico de Bejenado, entonces, como se ha mencionado, se forma una corriente de agua en medio de la cuenca del valle. Además, el agua preciada de las nubes de niebla se condensa en las laderas durante los períodos de transición. Cuando estábamos una vez allá, había una espesa nubosidad cerrada sobre nosotros, cuya humedad se condensaba en las paredes rocosas mientras al mismo tiempo podíamos disfrutar de la maravillosa vista sobre el luminoso Valle de Aridane.

Estas tierras fértiles ya habrán sido utilizadas por los indígenas para producir productos alimenticios importantes para el consumo humano y animal en la proximidad directa de sus refugios. A continuación, «la referencia del italiano Cadamosto, cuyo libro data de 1455, al apuntar que en Gran Canaria, Tenerife y La Palma los pobladores prehistóricos se alimentaban con trigo y cebada (Morales Padrón, 1978). A finales del siglo XVI nos encontramos con otro portugués, Gaspar Frutuoso ([1590] 1964: 108), quien aseguraba que los auaritas consumían gofio que preparaban con cebada tostada» (Pais Pais, 1998; 2252Felipe Jorge Pais Pais, 1998. El bando prehispánico de Tigalate-Mazo. Ayuntamiento de Villa de Mazo. Cabildo Insular de La Palma. Centro de la Cultura Popular Canaria. Págs. 1–451; 225.)

Tesoros arqueológicos en torno a la Peña del Diablo

El arqueólogo y director del Museo Arqueológico Benahoarita (MAB) en El Paso, Dr. Jorge Pais, explica en mayo de 2021 en una contribución cinematográfica de Ángeles Díaz que el Pico de Bejenado «ésta dividido prácticamente por el punto más alto en dos zonas. […] Toda la mitad oriental hacia El Riachuelo es una de las zonas con mayor concentración de estaciones de grabados rupestres de La Palma. Hay en torno a una veintena de estaciones de grabados rupestres de ellas, la más grande de toda la isla con diferencia como es la del Lomo de Tamarahoya. […]

En la falda del Pico Bejenado, entre ellas al Barranco de Torre que vemos aquí, luego hablaremos, era una de las zonas de mayor concentración poblacional en la época prehispánica […] Este lugar para el tipo de vida que tenían los benahoaritas fundamentalmente ganaderos y también agrícolas. […]

Ese poblado de cuevas (La Hoya Peña del Diablo), esa gran cantidad de cuevas naturales que hay, es un poblado de cuevas benahoaritas enorme, tiene más de una veintena de yacimientos de habitación. […] Y además se ve corroborado por la presencia de fuentes permanentes, en concreto hay dos, […]

Planes de restauración de la antigua red de caminos entre diferentes lugares interesantes

Ilust. 6: Desde esta perspectiva se puede ver la mitad occidental del hoyo, así como otras grandes cuevas al alcance del oído y de la vista. Al fondo, el amplio lado sur del Bejenado.

Y este barranco que es el Barranco de Torre se puede caminar hasta los años 70 y 80 del siglo pasada había una pista por el cauce del barranco que llegaba hasta arriba lo que vemos arriba, es el risco de la de la Hiedra. (…) y justo encima, justo detrás esta por ejemplo la Fuente de Tamarahoya o ya los grabados rupestres del Lomo de Tamarahoya o ya de Lomos Gordos de La Trocha y luego ya podemos enlazar con él, con el Pico de Bejenado. […]» (Díaz, 20213Ángeles Díaz, 2021. Los «Díaz» con Ángeles 05.05.21 – Jorge Pais, Peña del diablo [Película, respectivamente a partir del minuto 2:51, 3:45, 5:57, 6:45, 9:52. http://www.losdiazconangeles.com/2021/05/05/los-diaz-con-angeles-050521-jorge-pais-pena-del-diablo/).

Enlace a la contribución: Jorge Pais, Peña del Diablo

En ‘La Peña del Diablo’ fueron examinadas las cavidades volcánicas

Ilust. 7: Vista desde la Peña del Diablo hacia la mitad occidental del hoyo. A la izquierda vemos terrazas más nuevas y a la derecha más antiguas, así como diferentes tipos de cuevas.

«En la parte inferior, el cauce es relativamente ancho, destacandola zona conocida como ˈLa Peña del Diabloˈ: unenorme anfiteatro natural con el fondo abancalado para elcultivo de secano (hoy abandonado) donde además llama la atención la presencia de un roque (la ˈPeñaˈ que le da nombre). Aguas abajo desde ˈLa Peña del Diabloˈ, el Bco. de Torres queda separado de una barranquera afluente suya, localizada al Noroeste, por un cuchillo que se muestra más delgado en la zona donde contacta con el anfiteatro. […]

En la propia zona de ˈLa Peña del Diabloˈ son visibles a su vez numerosas bocas, […]. Sin embargo, tras una exploración minuciosa de los cortados de dicho estrato (media de unos 40 m de desnivel) no se ha hallado ningún tubo volcánico en su seno, todo lo más burbujas que se han abierto a la pared, amodo de abrigos más o menos profundos, debido a la erosión. De entre ellas, una de las más significativas es un caboco colgado, que se exploró dada la posibilidad de que se tratase de un tubo; finalmente resultó de recorrido escaso (~ 8 m) aunque destaca la presencia de restos aborígenes, particularmente fragmentos de cerámica de la Fase III (todo pese a la dificultad que presenta su acceso)» (Fernández et al., 20074Octavio Fernández, et al., 2007. Las cavidades volcánicas de El Paso III: sectores de barranco de los Cardos – barranco de El Riachuelo y de Torres. La Palma, Islas Canarias. Grupo de Espeleología Tebexcorade – La Palma. Págs. 6–45; 8+9.).

Enlace al grupo de espeleólogos: Tebexcorade

Resultado

Se ha encontrado una base sólida y convincente para la primera interpretación completa de un mapa rupestre

Este petroglifo muestra características asociables a las del Hoyo-Peña de Diablo, El Paso, La Palma.
Ilust. 8: Los petroglifos de la estación de grabados rupestres La Fajana I.

De la veintena de petroglifos de la estación de grabados rupestres El Lomo de La Fajana en El Paso, el símbolo señalado en rojo en la ilustración parece representar el Hoyo Peña del Diablo. Esta hondonada de singular belleza se encuentra al pie de las montañas Pico de Bejenado y de la Hiedra, ya explicadas  anteriormente, que obviamente estaban simbolizadas por los grabados rupestres soliformes adyacentes.

Cómo demuestran las imágenes de los petroglifos y la fotografía siguiente, la disposición espacial de los tres símbolos interpretados hasta ahora, se corresponde con la ubicación real de los elementos paisajísticos localizados.

Ilust. 9: Tres elementos paisajísticos destacados en el margen del Valle de Aridane. La foto pequeña muestra la disposición de los grabados rupestres y la grande la relación espacial de los elementos posiblemente representados por esos símbolos.

Lea más: Como se puede ver, un grabado rupestre simboliza el volcán de Argual

  • 1
    Felipe Jorge Pais Pais. Estudio Detallado de Impacto Ecológico de las Normas Subsidiarias de El Paso. La Palma. Sauquillo, Lucía et. al. Aspectos arqueológicos de Dr. Jorge Pais Pais. INMACAN- Investigación Medio Ambientales Canarias S.L. Juni 1994. Págs. 48- 49.
  • 2
    Felipe Jorge Pais Pais, 1998. El bando prehispánico de Tigalate-Mazo. Ayuntamiento de Villa de Mazo. Cabildo Insular de La Palma. Centro de la Cultura Popular Canaria. Págs. 1–451; 225.
  • 3
    Ángeles Díaz, 2021. Los «Díaz» con Ángeles 05.05.21 – Jorge Pais, Peña del diablo [Película, respectivamente a partir del minuto 2:51, 3:45, 5:57, 6:45, 9:52. http://www.losdiazconangeles.com/2021/05/05/los-diaz-con-angeles-050521-jorge-pais-pena-del-diablo/
  • 4
    Octavio Fernández, et al., 2007. Las cavidades volcánicas de El Paso III: sectores de barranco de los Cardos – barranco de El Riachuelo y de Torres. La Palma, Islas Canarias. Grupo de Espeleología Tebexcorade – La Palma. Págs. 6–45; 8+9.